jueves, 20 de octubre de 2011

¡No faltes!

El próximo sábado 22 de octubre, de las 9:00 a las 14:00hrs, en el Templo Expiatorio a Cristo Rey, Antigua Basílica de Guadalupe tendré uno más de mis retiros, mensuales. En ésta ocasión, recordaremos al beato Juan Pablo II en su día, pues fue en la ceremonia de beatificación cuando el Papa Benedicto XVI dijo que éste día sería dedicado al nuevo beato.


Por la tarde (a las 17:00hrs) celebraré una misa en memoria del "Papa mexicano".


Te espero, invita a tu familia y amigos.
Mons. Pedro Agustín Rivera



Meditación del 21 de Octubre del 2011

11-10-21. Viernes 29º
Lc 12, 54-59.

JESÚS, NO ES UN METEREÓLOGO.

Mons. Pedro Agustín Rivera Díaz

Evangelio: Lucas 12, 54-59: En aquel tiempo dijo Jesús a la multitud: «Cuando ustedes ven que una nube se va levantando por el poniente, enseguida dicen que va a llover y, en efecto, llueve. Cuando el viento sopla del sur, dicen que hará calor, y así sucede. ¡Hipócritas! Si saben interpretar el aspecto que tienen el cielo y la tierra, ¿por qué no interpretan entonces los signos del tiempo presente? ¿Por qué, pues, no juzgan por ustedes mismos lo que les conviene hacer ahora? Cuando vayas con tu adversario a presentarte ante la autoridad, haz todo lo posible por llegar a un acuerdo con él en el camino, para que no te lleve ante el juez, el juez te entregue a la policía, y la policía te meta en la cárcel. Yo te aseguro que no saldrás de allí hasta que pagues el último centavo».

I.- ENSEÑANZA BREVE: Planea tu vida o serás planeado. Hay quienes no saben tomar decisiones o no quieren tomarlas. Ciertamente nos podemos equivocar pero al tomar una decisión y asumir las consecuencias de nuestros actos, nos realizamos como personas. Si nos equivocamos podemos corregir rumbo, si acertamos podemos disfrutar del éxito. En uno u otro caso lo importante es que tomamos una decisión y asumimos las consecuencias de nuestros actos.

II.- VER - JUZGAR  -ACTUAR
VER
Hay quienes piensan que la juventud, el dinero, el placer, el poder o la misma vida, les va a durar toda su existencia biológica. Hay quienes no saben o no quieren pensar en la Vida Eterna y por lo mismo o vagan sin sentido en su vida o pretenden encontrar el sentido a su existir en cosas pasajeras, sin tomar en cuenta el valor supremo de la Vida en Dios.
JUZGAR
El ser humano, en el mundo material, es el único que puede gozar de la felicidad y para ello requiere de tener algo o alguien por qué o por quien luchar. Quien se pone metas y se esfuerza por alcanzarlas, es productivo. Quien reconoce lo efímero de la vida y pone su atención en realizar su existencia para glorificar a Dios, alcanza la felicidad máxima, la santidad.
ACTUAR
Si quiero ser feliz en esta tierra no puedo postergar mi decisión de vivir en estrecha relación con Dios, a través de la oración, de los sacramentos y del servicio a mis hermanos, procuraré hacer el mayor bien posible.

III.- LECTIO DIVINA. Leer – meditar – orar – contemplar - actuar.
Jesús está rodeado de una multitud y les invita a tener a fe, reconociendo que en medio de ellos está Él, que es Camino, Verdad y Vida. Por lo que exhorta a su auditorio a que abra su mente y su corazón al mensaje de la salvación.

LEER. Hoy Jesús invita a su audiencia a la conversión -“metanoia”- de mente y de corazón, conversión, que se ha de manifestar cada día, en el trato con Dios, con los demás y con obras.

MEDITAR: Jesucristo es Verdad, Camino y Vida. Sus palabras traen la auténtica felicidad a la humanidad. Sin embargo, hay una gran mayoría de personas que no lo conocen, a algunos no les interesa lo que dice, otros lo oyen pero no hacen caso a sus palabras, porque están distraídos o “dormidos” o “contentos y acomodados” en sus estilos de vida. Afortunadamente también hay quienes le escuchan y se esfuerzan por seguirlo. ¿Tú a qué grupo perteneces?

Para llamar la atención de su auditorio, el Señor Jesús, habla del clima: “las nubes”, “la lluvia”, “el calor” y del “viento”. Cuando tiene cautiva la atención de sus “oyentes”, les llama “hipócritas”, con la intención de hacerlos reaccionar y que “le escuchen” y ya no solamente “le oigan”. Jesús, no es un metereólogo, lo que desea, es hacernos comprender la importancia de seguirlo, sin guardar odios o rencores, para ser felices y alcanzar la Vida Eterna, haciendo felices a los demás.

Para lograr esto, entre otras cosas, es importante el perdón que podamos dar o recibir, y por eso nos invita a vivir “ligeros de equipaje” de tal manera que nada nos impida experimentar la grandeza de su amor.

ORAR: Señor, me quiero poner en tu presencia, haciendo un lado cualquier pecado o sentimiento que me impida experimentar tu amor, amarme a mí mismo y amar a los demás. Por eso Señor, introducido en el “camino” que eres Tú, te pido me des tu paz, pongas en orden mis sentimientos encontrados, perdones mis pecados, sanes mis heridas por resentimientos y odios guardados y reconciliado Contigo y con los demás, sea “libre de equipaje” para poder, en todo amarte y servirte en mi prójimo.

CONTEMPLAR: El término griego “metanoia” significa conversión. El Señor Jesús está en medio de nosotros y nos da muchos signos a través de los cuales podemos reconocer su presencia amorosa en nuestras vidas. Por eso nos invita a que estemos despiertos y hagamos a un lado todo lo que pudiera ser un obstáculo para amarlo a Él y amarnos unos a otros.

Jesús sabe que muchas veces no experimentamos su amor porque “vivimos” atorados en nuestros sentimientos y en nuestras actividades. Incluso sabe que muchas veces somos “hiperactivos” por tantos sentimientos encontrados que llevamos en nuestro interior, así que nos pide que en el “Camino”, es decir en Él, nos reconciliemos con Dios y con los demás.

ACTUAR: Revisaré mi vida y mis sentimientos. Le pediré al Señor que me perdone y si lo necesito me acercaré al Sacramento de la Reconciliación. También es importante que planeé qué cosas haré para que mi familia y mis amigos sean mejores, se acerquen y conozcan a Jesús.

Para hacer llegar algún comentario, puedes escribir a evangelizarorando@yahoo.com.mx

“Que todos te conozcan y te amen es la única recompensa que quiero”. M. María Inés Teresa (Beatificación 21-abril-2012)

Seguimos el esquema de la Lectio Divina: Leer, meditar, orar, contemplar y actuar.
Leer, es escuchar la Palabra de Dios y ponerla en contexto.
Meditar es reflexionar sobre lo que el texto bíblico me dice.
Orar: Es responder a la Palabra, qué le digo a Dios: es petición, intercesión, agradecimiento, alabanza, etc.
Contemplar el reto de llegar a la conversión de la mente, del corazón y de la vida, según el Corazón de Cristo.
Actuar, es mi compromiso por hacer vida la Palabra de Dios.